jueves, 11 de mayo de 2023

Cap. VIII - La pervivencia de una memoria sanctitatis (Juan Vaccari: un hermano para siempre)



TERCERA PARTE

ACTUALIDAD DEL HERMANO JUAN

Prólogo: Un hombre bueno en la puerta de al lado

            El Papa Francisco habló en una ocasión de los “santos de la puerta de al lado”, lo que significa dos cosas: por un lado, que la santidad puede y deber ser una aspiración de cada cristiano, y no algo reservado a los fundadores de congregaciones o a los jerarcas de la Iglesia, y, por otro lado, una invitación a descubrir ‘santidad’ en quienes nos rodean, porque verdaderamente existe y está presente en muchas personas con las que nos cruzamos a lo largo de nuestra vida.

            Juan encaja perfectamente en estos santos de la puerta de al lado. Él fue el menos robusto de los hermanos y el menos apto para los trabajos rudos del campo. Fue el menos brillante de los estudiantes de Sanguinetto. Fue el seminarista que aspira al sacerdocio, pero al que se rechaza por sus sonoros fracasos con los libros. Dentro de la congregación de los Siervos de la Caridad, nunca ocupó un cargo importante ni fue superior de ninguna casa. Permaneció durante casi quince años entre pucheros y cazuelas, azacaneando de un sitio para otro en busca de alimentos que, luego, tenía que cocinar para dar de comer a los seminaristas. En el Palacio de la Chancillería entró como un criado más, al que se llegó incluso a despedir, después de unos meses de trabajo. Y para el cardenal realizó las tareas más humildes, como cuidar, limpiar, asear y velar durante su enfermedad. En España, sin dominar el idioma, tuvo que recorrer miles de kilómetros, llamando a la puerta de escuelas y parroquias, para atraer a jóvenes rurales a su Colegio. Y, sin embargo, allí por donde pasó dejó el perfume de su bondad. En Juan Vaccari se hace realidad lo que está escrito en la Primera carta a los Corintios: “Dios ha elegido a los débiles del mundo para humillar a los fuertes, a los que nada son para anular a los que son algo”.

Admiraron su piedad y su entusiasmo los jóvenes de la Acción Católica en su Sanguinetto natal. Encendió con su devoción a los feligreses de la pequeña aldea de Monteggia. Fue servicial con los seminaristas de Barza a los que preparaba de comer. Dio ejemplo de sencillez cristiana a los altos dignatarios que se paseaban por las estancias palaciegas de Roma. Y hasta el mismo cardenal tuvo que rendirse a la vida sacrificada y a la entrega sin peros del hermano Juan. Supo atraer la generosidad de amigos para la nueva misión en España. Ganó con su alegría y su devoción sincera el corazón de los alumnos del Colegio San José.

Solo después de su muerte, cuando los ojos de muchos se posaron en sus cuadernos y los testimonios empezaron a aflorar un poco por doquier, muchos comprendieron el “misterio” de este fraile. Faltaba una pieza, la más importante, para completar el puzzle. Y esa pieza era su íntima relación con Dios. Cada uno de sus movimientos, acciones, palabras, pensamientos estaba dirigido a Dios. Dios era el nutriente de su tierra y también la meta a la que aspiraba. Levantarse, cavar el huerto, conducir el coche, hacer juegos de magia, leer el oficio, asistir a misa, recitar el rosario, suscitar las generosidad entre sus bienhechores, escribir una carta, preparar una comida, regalar una botella de licor, plantar chopos, mediar entre los religiosos, ofrecer a Dios su vida en lugar de un enfermo, llorar como un niño cuando recordaba a su madre, preparar una piñata, arrodillarse durante horas ante el santísimo, llevar el cilicio en sus carnes, reír como un bendito en el soga-tira del patio, traer baúles llenos de regalos desde Italia para los estudiantes españoles, prepararse día a día para morir… Todo era uno: Dios. Su existencia, aparentemente ordinaria y común, escondía al místico y velaba al hambriento de absoluto.

Cap. VIII - La pervivencia de una memoria sanctitatis

1.- Fervientes propulsores de la figura del Hno. Juan

            Cuando intentamos comprender la personalidad de Juan Vaccari, es de justicia recordar la figura de Carlos d’Ambroggi, en Italia, de Danilo Vaccari, en Paraguay, y de Andrés García, en España.

Carlos d’Ambroggi (1907-1988). Tras ejercer como Superior General de la Congregación de los Siervos de la Caridad durante el sexenio que va de 1958 a 1964, llega a España en 1965. En Aguilar de Campoo acoge al hermano Juan y muy pronto empieza a admirar su profunda espiritualidad. Cuando Juan Vaccari fallece, P. Carlos está en Roma, pero enseguida vuela a España para llevar las condolencias de toda la congregación y bendecir sus restos mortales. P. Carlos sintió el impulso, nada más acabar el funeral, de recoger papeles, escritos y cartas por la habitación. En los siguientes meses pidió a muchas personas que habían conocido al hermano Juan que escribiesen su testimonio. Y él mismo escuchó decenas de relatos que después pasó a las cuartillas. En su estudio romano, redactó la primera biografía del hermano Juan, en italiano y en español. Y dio al libro un título muy significativo: “Hermano Juan Vaccari, siervo de la caridad”, porque, para P. Carlos, el hermano Juan había encarnado, como pocos en la historia centenaria de la congregación, el ideal del buen siervo de la caridad.

Luego se convencerían muchos otros, pero P. Carlos fue el primero. La segunda vida a la que estaba destinado Juan, ese vivir en muchos otros después de morir, lo debemos en gran medida a su trabajo.

La memoria del hermano Juan permaneció intacta en el Colegio San José de Aguilar de Campoo, que había disfrutado de sus últimos seis años y donde se había producido su fallecimiento. Religiosos, profesores y alumnos, gentes sencillas del pueblo nunca lo olvidaron y cada nueve de octubre se volvía a hablar del hermano Juan y a recordar sus virtudes.

Y en muchas ocasiones, se pensó en recoger documentación y dar los primeros pasos para su proceso de beatificación, pero todo quedaba ahí, en una aspiración inconcreta, en un lejano sueño.

Por otro lado, a una escala menor, pero con gran entusiasmo, Danilo Vaccari (1922-2016), primo carnal, al que el hermano Juan animó a entrar en los guanelianos, mantuvo en su entorno misionero de Paraguay encendida la llama de su recuerdo, dando a conocer su figura a todos con los que se encontraba. Él fue el que encargó el primer comic, que fue apareciendo por capítulos en la revista Ecos Guanelianos, para facilitar a los niños y a las gentes humildes de la misión paraguaya la comprensión de los rasgos esenciales del Hermano Juan.

En España, hemos contado con P. Andrés García, un incondicional propagandista, en el mejor sentido de la palabra, del espíritu de Juan Vaccari. Ha confesado en más de una ocasión que le debe su vocación religiosa. Cualquier aniversario era una buena ocasión para avivar su memoria. Consiguió también fotocopiar en el Centro Studi de Roma sus escritos. A partir de ahí, empezó a estudiarlos, y a profundizar más en su personalidad. Importunó, a tiempo y a destiempo, a la cura generalicia para que iniciara el proceso de beatificación. También en su periplo misionero por Nigeria, Congo y México no cesó de hablar de su admirado educador. Podemos decir que P. Andrés tomó el relevo de P. Carlos y que, en las últimas décadas, ha sido el promotor de muchas de las iniciativas llevadas a cabo. Ha continuado recopilando documentos y testimonios, tanto en Italia como en España, y ha mantenido el lazo de unión con los familiares de Juan Vaccari en Sanguinetto.

 

2.- En el nombre del Hermano Juan: una vida que inspira.

Podemos decir, sin lugar a equivocarnos, que la vida del hermano Juan, no sólo ha inspirado buenos pensamientos en la intimidad de la conciencia de quienes lo conocieron y admiraron, sino que también ha inspirado iniciativas concretas y buenas obras. No estoy al tanto de todas las que se han producido, pero de muchas sí.

En el campo de la literatura, habría que mencionar también el libro de bolsillo publicado en 2002 en italiano “Fratel Giovanni Vaccari”, de Mario Sgarbosa. En 2014, el Centro Guaneliano Juvenil de Como publica un cuidado y simpático comic “Andiamo a Gesú con Fratel Giovanni Vaccari”. En 2021 se dio a la imprenta sobre el hermano Juan que lleva por subtítulo “Un hombre bueno que vivía de Dios”, y que fue distribuido en los ámbitos guanelianos de México, Colombia y Argentina . Habría que añadir los muchos artículos aparecidos en diversas revistas guanelianas, Servire, La Divina Provvidenza, Ecos Guanelianos, la Santa Crociata. Especialmente encomiable ha sido la labor de la revista SERVIR, de España, a cuya figura ha dedicado números especiales. No hay que olvidar las charlas dedicadas a su vida en España con motivo de los recurrentes aniversarios de su fallecimiento. El bloguero Adán Breca ha glosado en varias de las entradas de su blog diversos aspectos de su biografía.

En octubre de 1996, con motivo de la ceremonia del traslado de la primera piedra del colegio de Aguilar de Campoo a la Villa San José de Palencia, se celebra el primer homenaje público al hermano Juan, y se coloca en el vestíbulo del antiguo Colegio San José, una placa que dice así: “Esta fue la primera casa de los guanelianos en España. Al hermano Juan, piedra angular del que fue Colegio San José, en el 25 Aniversario de su muerte”.

El 9 de octubre de 2003, y por iniciativa del exalumno Bautista Aguado, se celebra por primera vez, en un círculo aún muy pequeño, el Día de los Caramelos, después recordar en un artículo el valor y el sentido del célebre párrafo de su testamento “Si a la hora de mi muerte, se encontrase algo de dinero en mis bolsillos, os ruego que compréis caramelos para los bounifigli”. En aquella primera ocasión, los guanelianos españoles, allí donde se encontraban, rindieron homenaje a su antiguo educador, repartiendo caramelos a las personas asistidas en sus respectivas comunidades. Actualmente, el Día de los Caramelos se celebra en varios países con presencia guaneliana.

Varios pabellones o edificios llevan el nombre del hermano Juan en España: Casa Hermano Juan en Salcedillo, para campamentos, Casa Hermano Juan en Palencia, que funciona como residencia de chicos con discapacidad, Casa de acogida Hermano Juan en Madrid, para migrantes y refugiados. Plaza Hermano Juan en el patio de la casa de las hermanas guanelianas en Madrid.

A él también le han sido dedicadas canciones, poemas, audiovisuales. “Enamórame, Señor”, tejida con las propias palabras de Juan Vaccari y compuesta por Andrés García y Alfonso Martínez puede ser un ejemplo. Recientemente una pintura de Annalisa sobre el Hermano Juan adorna uno de los pasillos de la Casa de las Hijas de Santa María de la Providencia en Lora-Como.

En 2013, la Ongd Puentes instituye el Premio Hermano Juan concedido anualmente a una institución o asociación que destaquen en el sector de la discapacidad o de la lucha contra la pobreza. La cuantía de este premio es el 1% de lo recaudado por la Ongd a lo largo del año.

En 2021, tímidamente, coincidiendo con la celebración del Día de los Caramelos, se propone celebrar este día con un gesto solidario que sirva para apoyar un proyecto del sector de la discapacidad en cualquier rincón del mapamundi guaneliano. En 2022, el proyecto elegido fue el trabajo de las casas de Polonia y Rumanía en favor de los ucranianos refugiados con algún tipo de discapacidad. Si se consigue que cada 9 de octubre se aúne la celebración de los caramelos con la generosidad hacia un proyecto en favor de los buonifigli, estaríamos dando cabal cumplimiento al Testamento de los Caramelos.

El inicio del proceso diocesano de beatificación ha aumentado el interés por conocer más y mejor a este buen fraile. En distintas partes del mundo guaneliano se han programado charlas y seminarios: desde los cooperadores y laicos del ámbito hispano guaneliano a los religiosos de India y Filipinas.

 

3.- 2013: Celebración del Centenario de su nacimiento

En 2013, y por un empeño personal de Andrés García, y otros alumnos del hermano Juan, ve la luz la publicación de la denominada Autobiografía y el Diario Espiritual del Hermano Juan, tanto en español como en italiano, con prólogo de P. Alfonso Crippa, por entonces Superior General y que había convivido con el Hno. Juan en Aguilar. Después de una larga tarea de traducción, y de un análisis y crítica literaria, estos dos documentos esenciales pudieron ser dados a la imprenta.

La publicación de este volumen supone un paso adelante en la difusión del legado del hermano Juan. Por primera vez muchas personas pueden conocer su mundo interior, su manera de rezar y de creer. La denominada Autobiografía, título que en realidad se lo otorga el P. Carlos d’Ambroggi, es básica para comprender los primeros 20 de la vida de Juan Vaccari, ya que nos proporciona preciosos datos para comprender su vida y su alma.

En ese mismo año, diversas charlas y celebraciones litúrgicas recuerdan en Palencia, Aguilar y Sanguinetto el centenario de su nacimiento.

También coincidiendo con esta efeméride, se difunde un escrito en el que Juan manifiesta su deseo de descansar definitivamente en Barza d’Ispra, donde había pasado casi veinte años entre las tareas de la cocina y el ímpetu apostólico en Monteggia. Por este motivo, sus restos mortales son trasladados desde el panteón de la Familia Guaneliana en el Cementerio Mayor o Monumental de la ciudad de Como hasta la capilla de la Virgen de Barza d’Ispra. Finalmente, el hermano Juan descansaba en su “querida Barza”.

También, en este año, Mons. Mario Masina, obispo de Verona, aprueba oficialmente la oración de intercesión al Hermano Juan. Parecía que este año de 2013 era la fecha propicia para la apertura del proceso… Pero la cosa, inexplicablemente, se enfrió

 

4.- Plácet de la Curia Generalicia y nombramiento del nuevo Postulador

El 15 de julio de 2020, la Curia Generalicia nombra a Bruno Capparoni Postulador General de la Congregación de los Siervos de la Caridad para las causas de los santos, con una encomienda concreta y especial: hacerse cargo del caso “Juan Vaccari” y proseguir las causas ya iniciadas de la beata Clara Bosatta y del siervo de Dios Aurelio Bacciarini. Nadie pone en duda el rigor académico y la solvencia intelectual de Bruno Capparoni, que durante años dirigió el Centro Studi de los guanelianos, en Roma. Si bien Bruno no llegó a coincidir con el hermano Juan, es cierto que vivió en Aguilar de Campoo y Palencia, lugares llenos de la presencia de Juan Vaccari. Finalmente, y digo finalmente, con el significado castellano de ¡ya era hora!, la Casa Generalicia, después de incomprensibles años de tibieza y de continuos jarros de agua fría a las no pocas solicitudes que se hacían desde España, da el plácet para que se  inicie la causa de santidad.

Se establece que el proceso debe comenzar en la diócesis de Palencia, donde tuvo lugar el fallecimiento del Hermano Juan. Consultado el obispo, Mons. Manuel Herrero, religioso agustino, este manifiesta su apoyo sin fisuras a la causa y anima a proceder lo antes posible, “antes de que me releven como obispo”. Se le entrega la primera documentación. La diócesis de Palencia eleva a la Conferencia Episcopal Española la petición de Nihil Obstat. Poco después, el Nihil Obstat es solicitado también al Vaticano. Ni una ni otro ponen obstáculos a la apertura de la causa.

 

5. 2021 - Celebración del Cincuentenario de su muerte.

Sanguinetto, Barza d’Ispra, Aguilar de Campoo y Palencia celebran diversos actos para conmemorar las cinco décadas transcurridas desde la muerte de Juan Vaccari.

La ermita románica de Aguilar de Campoo conoció la “segunda canonización” del hermano Juan la mañana del 10 de octubre de 2021. La primera tuvo lugar el día de su propio funeral, por obra y gracia de Don Ciriaco Pérez. En esta bellísima ermita, a los pies del castillo feudal de la villa de Aguilar de Campoo, ante el hermoso capitel de la muerte de los santos inocentes, se produjo una verdadera conmoción por los testimonios vibrantes de exalumnos, religiosos y superiores. No está de más recordar que el “allora rimango” del hermano Juan se produjo un 28 de diciembre, festividad de los santos inocentes. Y que uno de los nombres que el castellano reserva para nombrar a las personas con discapacidad psíquica (buonifigli) es precisamente “inocentes”, tal y como magníficamente nos lo describe Miguel Delibes es su novela Los santos inocentes. Nicolas Castellanos (obispo emérito) y Manuel Herrero, ambos agustinos, quisieron unirse a este caluroso y ferviente homenaje. Quedó claro y patente que la memoria de su bondad no se había esfumado y que el recuerdo de su vida podía seguir ayudando y beneficiando a muchos. Una solemne eucaristía en la Colegiata de San Miguel congregó a centenares de personas.

También, con motivo de este cincuentenario, se abre una página en Facebook, para servir de punto de encuentro a los seguidores y amigos de Juan Vaccari, y ventana donde aparezcan noticias sobre su pensamiento y obra.

 

6.- Fase Diocesana del Proceso de Beatificación y Canonización: Siervo de Dios Juan Vaccari.

El 23 de abril de 2022, a las 11 de la mañana, en la capilla del Obispado de Palencia, ante un reducido número de invitados, por causa del Covid, con la presencia del Superior General, P. Umberto Brugnoni, del Postulador, P. Bruno Capparoni, del Tribunal Diocesano para las causas de los santos, de familiares llegados de Italia, de religiosos, clero diocesano, hermanas guanelianas y exalumnos tiene lugar, de forma solemne, la Apertura del Proceso de Beatificación y Canonización del hermano Juan Vaccari (1913-1971). Una fecha importante en la pequeña historia de la Familia Guaneliana en España.  

El obispo de la diócesis, Mons. Manuel Herrero, presidió la ceremonia del inicio oficial de la Causa del Hermano Juan Vaccari, religioso profeso de la Congregación de los Siervos de la Caridad, “porque con el paso de los años su fama de santidad va creciendo entre el pueblo de Dios”. La Iglesia diocesana de Palencia invitaba a todos los fieles a proporcionar información y documentos útiles, al mismo tiempo que juraban sus cargos las personas encargadas de esta fase diocesana.

A partir de este momento, ante los tribunales diocesanos de Palencia y de Como, empiezan a desfilar los numerosos testigos que, bajo juramento de decir la verdad, responden a las preguntas formuladas por los miembros de los tribunales. En Septiembre de 2022, se da por finalizada esta primera fase en Como, con la asistencia del recién nombrado cardenal Óscar Cantoni.

Apenas siete meses después de la Apertura, tiene lugar la Clausura de la fase diocesana. Concretamente el 26 de noviembre de 2022, la Capilla del Obispado es otra vez el escenario elegido. De nuevo preside Mons. Manuel Herrero,  en presencia del Superior General de los Siervos de la Caridad y del Postulador de la Causa, así como de un pequeño grupo de amigos. Toda la documentación recogida sobre la vida y la obra del fraile guaneliano, incluidas las actas de los numerosos testigos, es sellada y lacrada para dar fe de la rigurosidad del proceso.

Mientras tanto, aumenta el número de personas que cada día rezan e imploran la intercesión del Hermano Juan Vaccari en sus oraciones a Dios. Las primeras gracias obtenidas se suman a la documentación.

El Superior General, verdaderamente conmovido, afirma durante la Clausura que, desde antiguo, la Iglesia señala, distingue y reconoce a sus hijos más excelsos, para que puedan servir de ejemplo y guía al resto de los creyentes. Todo parece indicar que así sucederá en un futuro con el hermano Juan Vaccari. Su vida y su obra serán huella que otros hombres y mujeres podrán seguir, sin miedo a extraviarse en el camino que conduce a Jesús y al hermano necesitado.

La documentación que sobrepasa las dos mil páginas llegó, pocas semanas después, al Dicasterio vaticano para las Causas de los Santos, donde se continuará el proceso. Desde este momento, con todo derecho, el hermano Juan Vaccari puede ser nombrado como el Siervo de Dios Juan Vaccari.

 

Familiares Juan Vaccario - Santurario Virgen de la Comuna

Iglesia de Sanguinetto. Celebración del Centenario

2013: Traslado de los restos del Hno. Juan de Como a Barza

Número especial de Servir

Día del Hermano Juan en Villa San José - Palencia

Inauguración de la Residencia Hno. Juan - Palencia

Capilla de Barza donde reposan sus restos mortales

Madrid 2003: Primer Día de los Caramelos

Cartel Día de los Caramelos 2022 Polonia


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