Los Bergson, una familia sueca, se
establecen en el estado de Nebraska para cultivar la tierra. A finales del
siglo XIX las grandes extensiones del suroeste americano empezaban a ser
ocupadas por familias venidas de medio mundo que buscaban domeñar una tierra
agreste y dura, que se resistía a perder su carácter salvaje. Muy pronto el
cabeza de familia de los Bergson muere, no sin antes hacer prometer a sus dos
hijos varones, Lou y Óscar, que se dejen guiar por los consejos y por la
sabiduría innata para la granja de su hermana Alexandra.
Los primeros granjeros vivían
acosados por las deudas, y desalentados por una naturaleza inhóspita que los
vapuleaba constantemente. Muchas familias se veían obligadas a abandonar sus
granjas y buscarse un trabajo como obreros en la ciudad. Es el caso de los
Linstrun, vecinos de los Bergson y que, con dolor de su corazón, deben vender
las tierras. El más apenado de los Linstrun será Carl, adolescente y amigo de
aventuras de Alexandra.
Inasequible al desaliento y dotada
de una mirada amplia sobre el porvenir, Alexandra logró sacar adelante las tierras de
su padre, comprar nuevas tierras, cambiar de cultivos. Pero Nebraska conoció
tres terribles años de sequía que expulsó a muchos granjeros y que puso a
prueba el carácter de la misma Alexandra. Fue la última rebelión de la tierra
antes de dejarse dominar por el arado. "Un pionero debía tener
imaginación. Debía ser capaz de
disfrutar con la idea de las cosas más que con las cosas mismas". Mientras
tanto, Emil, el pequeño de la familia es enviado a estudiar a la ciudad, para
que conozca otros mundos y para que, con sus estudios, pueda el día de mañana
hacer prosperar las tierras.
Willa Cather (1873-1946) es una
escritora norteamericana incómoda, por su no adscripción a la literatura
experimental o moderna tan en boga en su época. En Pioneros nos hace asistir a
los inicios de una nación, a los comienzos de repoblación de amplias
extensiones de terreno que poco a poco, con voluntad de hierro y con
sacrificios sin fin, empezaban a conocer la agricultura y la ganadería.
"La historia de todos los países empieza en el corazón de un hombre o de
una mujer". Nuevos granjeros llegan y se establecen como vecinos. Es el
caso del jovencísimo matrimonio de bohemios, los Shabata, formado por Marie,
extrovertida y un poco atolondrada, y por Frank, celoso y amargado. Son jóvenes
que han consumido rápìdamente su inicial pasión y que sólo ahora se dan cuenta
del abismo que los separa. En Emil y en Marie se despierta un amor que debe
permanecer oculto, porque ella es una mujer casada. Y estamos a finales del
siglo XIX. Una pasión que acabará en tragedia bajo una morera y tres disparos
del marido burlado.
Un buen día, muchos años después,
aquel adolescente que fue Carl Linstrum regresa para ver las tierras donde había
vivido por algún tiempo. Y es en este punto donde la vida de Alexandra, que
hasta ahora se ha limitado a trabajar las tierras y a perseguir la prosperidad
de los Bergson, conocerá una nueva aurora. Bellísima novela de Cather, una
pequeña alegría lectora en un año de libros de bajo perfil. La tierra, y todo lo que ella significa, es
protagonista también: "Pero el gran acontecimiento era la tierra en sí,
que parecía anegar los pequeños y esforzados indicios de sociedad humana en sus
sombrías extensiones. Enfrentándose con aquella inmensa dureza, su boca se
había vuelto amarga; porque sentía que los hombres eran demasiado débiles para
dejar su huella allí, que la tierra quería que la dejaran tranquila, quería
conservar su implacable fortaleza, su belleza de una índole salvaje y peculiar,
su melancolía sin interrupciones".
Desde que hace miles de años, los
cazadores-recolectores se hicieron agricultores, la posesión y el cultivo de la
tierra han sido dos pasiones inscritas en el ADN del ser humanos: "Nosotros
venimos y nos vamos, pero la tierra siempre está aquí. Y las personas que la
aman y la comprenden son las personas a las que pertenece... durante un
tiempo".
No hay comentarios:
Publicar un comentario